Impuesto a las bebidas azucaradas, ¿por nuestra salud o por afán recaudatorio?

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Este mes ha comenzado a aplicarse el Impuesto sobre Bebidas Azucaradas Envasadas (IBEE) en Cataluña, un impuesto que repercutirá directamente en el consumidor final. Una iniciativa que ha motivado el debate entre su aplicación o no para el resto de regiones, aunque por ahora, sólo Canarias tiene intención de implementarlo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió el pasado 11 de septiembre a los diferentes gobiernos un impuesto a las bebidas azucaradas que aumentase su precio en un 20%, con el objetivo de reducir el consumo de estos productos, a los que culpa del aumento de -entre otras enfermedades-, obesidad. Un problema que ya afecta -según la propia OMS- a cerca del 20% los de hombres y 23% de las mujeres europeas, y que en España tiene un gasto de más de 2,5 millones de euros anuales, según el Ministerio de Sanidad.
Y son varios los países que han cogido el guante del impuesto a las bebidas azucaradas. Por ejemplo, Reino Unido ya ha anunciado que se introducirá dicho gravamen a partir de abril de 2018, mientras en España, el gobierno central incluyó en su plan presupuestario para 2017 dicho impuesto sólo si se desvía el objetivo fijado para España de Déficit público.
Ésta no es la primera vez que se recurre a la fiscalidad para resolver problemas ligados a la salud. México, Colombia o Francia ya tienen una tasa sobre los refrescos azucarados y edulcorados. Dinamarca implantó en 2011 la llamada “tasa grasa”, presente también en otros países como Hungría o Ecuador.
¿Cuál creéis que es la motivación real de esta nueva fiscalidad?
¿Es una forma creativa de recaudación de impuestos para equilibrar presupuestos?, ¿Tiene el objetivo de mejorar la salud de los ciudadanos?, ¿acaso es simplemente una cuestión de ahorro de costes derivado del gasto que enfermedades como la diabetes o la obesidad tienen en las arcas públicas?
¿Qué opináis de esta actitud paternalista de los estados?, ¿Creéis que funcionarán dichos impuestos para reducir este consumo, o pasará como con el alcohol o el tabaco?
En definitiva, ¿estáis a favor o en contra de los impuestos a las bebidas azucaradas?, ¿qué otras alternativas proponéis?
¡Esperamos vuestros puntos de vista!
Bienvenidas sean todas estas medidas. Si bien hay estudios que demuestran que son más efectivas las soluciones de advertencia de exceso de azúcares en el embotellado que estos impuestos. Por ejemplo, el Pais Vasco descartó esta tasa porque la veia ineficiente para reducir consumo y la obesidad no es problema en esa CCAA. Madrid hizo lo propio porque prometio no subir impuestos. En definitiva, esta medida por si misma no vale, acompañada de otras y con campañas de concentracion pueden ser utiles.
Yo creo que es una iniciativa recaudatoria. La postura del gobierno central lo deja muy claro: se impondrán si es necesario para equilibrar los presupuestos. Por unos pocos céntimos más no vas a dejar de tomar tu bebida favorita. Otra cosa es el efecto en la comunicación: este tipo de cosas sirven como llamada de atención y, seguramente, ahí sí tendrán algún efecto.
Deben revisarse las obligaciones a productoras . Vemos que las normas en la fabricación de alimentos tiene mucho recorrido de mejora para nuestra Salud Os resultados de nuestra alimentación de se ven a largo plazo . Seguramente debiera incentivarse a l productor con deducciones para mejorar sus procesos ,que marcar un impuesto que finalmente pagan los consumidores y no los productores Pero que prima recaudación o salud?
Yo creo que es un poco de todo, por un lado ahorro del gasto sanitario, su parte proporcional de buenismo y postureo sin llegar a prohibir (como pedía algun comentario) para no dejar de ser democratas, y por supuesto, ingresar más dinero del contribuyente por las bebidas que más venden junto con el agua.
Azúcar en bebidas malo. Azúcar en café, pasta, pan, arroz, cerveza (tambien tiene azúcares) bueno. ¿Alguien no ve que esto de salud no tiene nada? La mayoria de CCAA ha dicho aue no lo implantan porque es una cosa que no necesariamente reduce el consumo y porque es para equilibrar balances...
Me parece bien. Hay que evitar sin prohibir que la obesidad prospere...las consecuencias las pagamos en mayor o menor medida, todos.
La OMS... esa organizacion que fomento gastos en vacunos estériles contra supuesta gripe aviar. La oms es instrumento de los países para justificar ciertos gastos, o como es el caso, añadir impuestos por '"nuestra salud"
Me encanta la actitud paternalista del estado, pero si tan malas son las grasas o el tabaco, ¿por qué no los prohibe? ¡Es afán recaudatorio aprovechando a la OMS!